Con determinación y en un ambiente de unidad, alrededor de 130 productores agrícolas del estado de Querétaro se movilizaron este miércoles hacia la caseta de Palmillas, acompañados de sus tractores, para hacer escuchar su voz ante la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER). Su exigencia es puntual: ser recibidos por una comitiva oficial y abrir una mesa de diálogo que atienda las necesidades urgentes del sector rural.
Desde temprana hora, los campesinos comenzaron a llegar a este punto estratégico, donde organizaron su manifestación de manera ordenada y pacífica. Con mantas y consignas, recalcaron que no buscan confrontación, sino soluciones reales a las problemáticas que enfrenta el campo queretano, entre ellas el alto costo de los insumos, la falta de apoyos y la ausencia de políticas públicas que fortalezcan la producción local.
Los manifestantes señalaron que, por ahora, no contemplan bloquear la caseta, pues confían en que el Gobierno Federal actuará con sensibilidad y abrirá canales de comunicación. Sin embargo, dejaron claro que mantendrán su presencia en el lugar el tiempo que sea necesario, hasta obtener una respuesta formal por parte de las autoridades de SADER.
“El campo alimenta a México y no puede seguir siendo ignorado”, expresaron algunos de los líderes del movimiento, quienes insistieron en que su lucha representa la defensa de su trabajo, de las familias que dependen de la producción agrícola y del futuro alimentario del país. Aseguraron que, pese a los desafíos, los productores de Querétaro continuarán unidos y firmes en su exigencia de respeto y justicia.
Con esta movilización, el sector agrícola queretano envía un mensaje contundente al Gobierno Federal: el campo no puede esperar más. Los productores piden ser escuchados, atendidos y reconocidos como pilares fundamentales de la economía y la soberanía alimentaria de México.


