A pesar de la interrupción en el suministro de agua potable ocasionada por el desfogue de la presa de Zimapán, la actividad comercial en la capital queretana no ha registrado afectaciones económicas, informó el presidente interino de la Cámara de Comercio, René Jordan Loya Poletti.
El empresario reconoció que existía preocupación entre los comerciantes por una posible baja en ventas; sin embargo, hasta el momento todos los establecimientos continúan trabajando con normalidad.
“En general no ha habido afectaciones, todos están trabajando y previendo la falta de agua… En el caso de los hoteleros, ellos ya están acostumbrados a operar con pipas y cuentan con reservas grandes en cisternas”, explicó.
Ante la posibilidad de que la situación se prolongue, la Cámara de Comercio tiene previstos convenios con al menos cuatro proveedores de pipas para garantizar el abasto a sus afiliados.
“En ese caso se ofrecen precios preferenciales: de mil 500 a mil 1,800 pesos por una pipa de 10 mil litros, y entre 200 y 300 pesos para el llenado de tinacos de 1,100 litros, dependiendo de la zona”, detalló Loya Poletti.
De esta manera, los comerciantes de Querétaro aseguran estar preparados para enfrentar los cortes de agua sin que ello impacte en sus operaciones.