El secretario de Obras Públicas y Desarrollo Urbano, José Pío X. Salgado Tovar, informó que, aunque algunos de los históricos Arcos de Querétaro sufrieron afectaciones menores por la caída de un rayo, no hay peligro estructural y se trabaja de inmediato en su reparación.
Salgado Tovar explicó que el impacto generó desprendimientos del aplanado en el caño, además de que algunas lozas o tapas se desplazaron ligeramente, pero aclaró que no se trata de daños graves ni comprometedores para la integridad del monumento.
“No es nada estructural, solo lo que se dañó superficialmente; el costo no es relevante y ya se está organizando quién hará las reparaciones, ya sea el municipio o el estado, de manera coordinada.”
La Secretaría estatal trabaja en estrecha coordinación con el gobierno municipal y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), a través de la Dirección de Sitios y Monumentos, para evaluar y ejecutar las labores de restauración.
“Estuvimos participando con el municipio y el INAH… se va a rehabilitar y se va a trabajar en conjunto para verificar los daños y realizar la reparación adecuada.”
Los Arcos de Querétaro son un símbolo emblemático de la ciudad: un acueducto de unos 1,280 metros de longitud y con aproximadamente 74 arcos, construidos en el siglo XVIII como parte de la infraestructura urbana para dotar de agua a la urbe  . La atención rápida y coordinada con el INAH y el municipio es clave para preservar este patrimonio sin impactos mayores ni demoras.
