La Comisión Estatal de Aguas (CEA) informó que continuará el proceso de desfogue de la presa Zimapán, motivo por el cual el Sistema Acueducto II mantiene suspendido su bombeo, provocando servicio irregular de agua potable en la zona metropolitana de Querétaro.
De acuerdo con la CEA, el tiempo y volumen del desfogue son determinados por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), con el objetivo de garantizar la seguridad de las familias y prevenir afectaciones en las localidades cercanas a la presa.
En esta ocasión, la CONAGUA autorizó un desfogue inicial de 300 metros cúbicos por segundo, cifra menor a la registrada en septiembre pasado, cuando se vertieron 500 metros cúbicos por segundo. La decisión busca minimizar riesgos en comunidades aguas abajo, considerando además que el embalse continúa recibiendo 270 metros cúbicos por segundo de agua pluvial proveniente de la región central del país.
Este volumen de entrada ha provocado que el nivel de la presa disminuya apenas un centímetro por hora, lo que ha llevado a las autoridades a ajustar las estrategias de distribución del vital líquido.
La CEA detalló que el suministro continuará de forma irregular mientras dure el proceso, y que se están regulando los volúmenes entregados para que la distribución sea equitativa y las afectaciones sean las menores posibles para la población.
Finalmente, la dependencia exhortó a la ciudadanía a mantenerse informada únicamente a través de los canales oficiales, y a hacer uso responsable del agua durante el periodo que dure la contingencia.
